La nostalgia sigue siendo el sentimiento que más gente arrastra en este siglo. Bajo la idea que asegura que todo pasado fue mejor, cualquier imagen, sensación, moda, olor o música que nos remite a tiempos anteriores roba nuestra atención.
La pornografía, dicen, también tuvo un pasado mejor: ése en donde no era tan popular la depilación láser, las cirugías de busto no abundaban y los directores le "echaban ganas" a la trama.
Para aquellos que añoran el cine para adultos vintage es ideal el programa Dave's Old Porn, que transmite actualmente su primera temporada por Showtime.
Su creador, el comediante Dave Atell, se sienta en un sofá, toma uno de los casetes VHS, lo mete en la videocasetera (niños, pregunten a sus papás qué significa eso) y realiza un análisis muy profundo de cintas clásicas como The Devil in Miss Jones (1973) y The Black Mystique (1989).
De acuerdo con Atell, la inquietud de tener un programa así le estuvo resonando en la mente durante cinco años, hasta que encontró un canal que le comprara la idea.
Cada emisión se hace acompañar de colegas como Chelsea Handler, Margaret Cho y Adam Carolla, para que le ayuden a deshebrar las escenas de la época dorada del porno, es decir, producciones estrenadas a principios de los años 70 y hasta mediados de los 80.
Lo mejor viene en la segunda parte del programa, cuando una celebridad de la industria XXX comparte anécdotas que sucedieron atrás de cámaras.
Entre los invitados VIP ha estado Ron Jeremy, quien hizo valiosísimas observaciones de una de sus cintas ilustres, The 'Extra Testicle' (1986).
Otra ocasión en la que el set se vistió de gloria sucedió cuando fue recibida Georgina Spelvin, conocida como la madrina del porno, quien platicó sus aventuras al filmar The Devil in Miss Jones, (1973), considerada junto a Deep Throat una de las películas de culto del género.
El televidente descubre en Dave's Old Porn que lo estridente del programa no son las escenas que se analizan ni el humor con el que se describen los cuerpos y las posiciones de los actores, si no que, por ejemplo, Spelvin de 75 años, ahora luce como cualquier anciana sonriente que uno podría saludar en la fila de las carnes frías del supermercado.
(FUENTE: noticiasnet.com.mx)
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